LOS REFRANES DE LOS VIEJOS

Por Peloecaña

Escribo este mensaje, con unos pocos de los refranes de antaño que siempre han sido una verdadera lección y una sentencia, para vivir en paz, fruto de la experiencia y la sabiduría de nuestros antepasados.

-. "Ahora no amarran perros con longaniza".

Ahora lo hacen con cuerda impregnada de mermelada.

-.” Mas vale pájaro en mano, que cien volando". 

Quien sabe cual será la opinión de una secuestrada ninfómana?

-. " A caballo regalado, no se le mira el diente".

Depende, si el caballo es el de Troya.

-. "Mas cansón, que testículo de cemento"

Salvo que la portadora sea del Partido Verde.

-. “Vaca ladrona no olvida el portillo".

Por eso la cerca de este gobierno está llena de portillos.

-. "Mas falso, que una moneda de cuero".

Juan Manuel Santos Calderón. 

-. "Mas peligroso que una aguja en un tamal".

El exfiscal Montealegre y el exalcalde guerrillero de Bogotá.

-. "Mas tenido que burro en bajada".

Cualquiera de los tacaños que usted conozca.

-. “El que mucho abarca, poco aprieta".

Roy Barreras y Armando Benedetti.

-. “No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". 

Solicitud respetuosa para el Presidente Duque.

-. "A Dios rogando y con el mazo dando".

El Dr. Álvaro Uribe Vélez.

-. "Primero cae un mentiroso que un cojo".

El gobierno de Santos y su lucha por disminuir el número de hectáreas cultivadas en coca.

-. " Agua que no has de beber, déjala correr".

Los falsos testimonios y los mensajes que pretenden engañar, emitidos por los medios y las redes sociales.

-. " Al que no quiere caldo, le dan tres tazas".

La dosis de los jueces corruptos a la sociedad colombiana.

-. "La ambición rompe el saco". 

Mensaje para Santrich.

-. "Donde menos se espera, salta la liebre".

El sobrino de Iván Márquez.

-. "Soldado avisado no muere en guerra".

Algunos Generales de hoy.

-. "No hay peor ciego, que el que no quiere ver, ni peor sordo, que el que no quiere oír".

La justicia colombiana.

-. "No quisiera estar en sus zapatos". 

En los de Santos, después del 7 de Agosto.

-. " Se metió en camisa de 11 varas". 

Prieto, el gerente de la campaña reeleccionista de Juan Manuel Santos.

-. "Mas contento que una mirla en un cerezo".

Los medios y contratistas enmermelados del régimen que, por fortuna,  ya fenece.

EL  ARTÍCULO 196º DE LA CONSTITUCIÓN

Por Peloecaña

Después de 8 años de suspensión criminal de la vigencia de la Constitución Política de Colombia, expedida en 1991, y esperando que el 7 de agosto de 2018, una vez posesionado el nuevo Presidente, vuelva a tener la calidad de Ley de Leyes,  y a ser observada por todos, sin excepción, espero que el nuevo Senado de la República le dé aplicación literal, dada su claridad meridiana, al párrafo segundo del artículo 196º del mandato constitucional, que a la letra dice: "Artículo 196. ... El Presidente de la República, o quien haya ocupado la Presidencia a título de encargado, no podrá salir del país dentro del año siguiente a la fecha en que cesó en el ejercicio de sus funciones, sin permiso del Senado". (Lo resaltado en negrilla es mío).

Cito este texto constitucional para impetrar, con todo respeto y consideración, a la corporación senatorial que ejerza a plenitud esa función y, en consecuencia, se abstenga de conceder el permiso, si Juan Manuel Santos Calderón solicita esa anuencia.

Fundamento mi respetuosa petición habida cuenta de que quien, por fortuna, ya deja el primer cargo de la República, no puede abandonar el país, sin antes responder por todas y cada una de sus actuaciones, en las que atropelló la juridicidad institucional, corrompió o intentó corromper a las demás ramas del Poder Público, a los gremios, a la Iglesia, a las Fuerzas Armadas, a los medios de comunicación, a muchos ciudadanos que no supieron resistir a la tentación de saborear la mermelada y el soborno consuetudinario, que fue impronta de estos larguísimos ocho años.

Santos debe responder por el no acatamiento a las notificaciones oficiales, que oportunamente le formulara el entonces Procurador General de la Nación, Dr. Alejandro Ordóñez Maldonado, advirtiéndole, con el talante que siempre ha caracterizado su vida pública y su gestión institucional, de la antijuridicidad de sus procederes, en casos puntuales, como el de la negociación con la guerrilla de las FARC, el soborno continuado a quienes creyó sobornables, la mengua de la integridad del territorio nacional, y el atropello a la soberanía colombiana y de sus procederes, siempre signados con el manoseo y violación de la ley.

Se burló de los connacionales  que atendimos su llamado a decir si estábamos de acuerdo con los funestos Acuerdos de la Habana y que, mayoritariamente,  respondimos NO, en el Plebiscito por él convocado.

Juró en vano, cuando al posesionarse, dos veces, de la Presidencia de la República y puso a Dios como testigo de que iba a cumplir la Constitución y la ley.

Indujo a algunos políticos y ciudadanos a violar la normatividad, que garantiza la pureza del sufragio.

Le debe una explicación a Colombia y al Ecuador, de su responsabilidad o inocencia del secuestro del Abogado Balda y su familia, incluida su hijita colombiana, en contubernio con el expresidente Correa.

Está por aclarar su participación en los casos de corrupción promovidos por Odebrecht, que tiene en la cárcel al responsable del manejo económico de su campaña a la reelección,  ciudadano Prieto,  y a dos de sus ministras fugitivas en el exterior, y ahí no termina el rosario de culpas y responsabilidades.

Señores senadores, ante tanta ignominia, Juan Manuel Santos no puede contar con su anuencia para abandonar el país e irse con el rejo en los cachos; de producirse su permiso ustedes responderán ante el tribunal de la historia, por lo menos de encubrimiento.

EJERCICIO DEL DERECHO DE PETICIÓN

Señor Doctor

Iván Duque Márquez 

Presidente elegido de Colombia

Presente

Este  modesto, pero honesto ciudadano colombiano, orgulloso hoy de compartir con más de 10.300.000 compatriotas el alborozo y la dicha del deber cumplido con la Patria, eligiéndolo a usted nuestro Primer Mandatario, con toda consideración y respeto, y en ejercicio del Derecho de Petición consagrado en el artículo 23º de la Constitución, en aras del interés general, me permito formularle, como Primera autoridad de la República, las siguientes peticiones:

1ª- Que inicie las gestiones pertinentes para que haya, ahora si de verdad, un diálogo con la insurgencia guerrillera, que sea el comienzo de recorrido del camino, para el logro de una paz sólida y definitiva, entre todos los colombianos y extranjeros residentes en Colombia, ya  que la pantomima del monólogo con la guerrilla de las FARC no nació a la vida jurídica, porque ese grupo terrorista nunca fue interlocutor válido, por ausencia de personería en el ámbito del Derecho Internacional Público, con entidad reconocida, para firmar Acuerdos o Tratados, que obligaran al Estado Colombiano y, porque al someter los fementidos Acuerdos de La Habana a la obvia consulta popular, bajo la figura de un Plebiscito, las mayorías que aceptaron absolver la  consulta plebiscitaria improbaron lo irregularmente pactado. 

2ª- Que tales diálogos se realicen dentro del más absoluto respeto y acatamiento a nuestra Constitución Política y al Derecho Internacional Humanitario y a todos los Tratados, Pactos, Convenciones e Instrumentos vigentes, propios del Derecho Internacional Público, garantizando la realización plena de la justicia, la verdad y la reparación de la víctimas, por cuenta de los victimarios.  

3ª- Que todas esas gestiones de paz se realicen en territorio colombiano, y entre colombianos, sin la injerencia de personas extranjeras y con la veeduría de Estados amigos de Colombia.

4ª- Que  disponga usted, señor Presidente, la restauración  y puesta en operación de las bases norteamericanas que funcionaron en Colombia, operadas por autoridades militares colombianas, para garantizar la lucha contra la insurgencia terrorista y el narcotráfico en todas su modalidades, desde los cultivos de coca y cualquier clase de plantas convertibles en narcóticos, la actividad productora de narcóticos y su comercialización.

5ª- Que se denuncien ante las autoridades competentes todas las actividades delictivas que sean conductas de corrupción, delitos contra la integridad nacional y la estabilidad institucional de la República, contra el sufragio y contra el erario, en todas su modalidades.

6ª- Que su gobierno proponga la inclusión  en la Constitución de la figura de la muerte civil, como pena principal para combatir la corrupción y a los corruptos.

7ª- Que su gobierno presente al congreso y defienda su aprobación, las normas legales que  prohíban, perentoria y totalmente, la participación de contratistas con el Estado, como aportantes a las campañas de los partidos y de los candidatos a todos los cargos de elección popular.

8ª- Que, de igual manera, su gobierno proponga y defienda ante el congreso la expedición de una ley que señale como causal de inhabilidad absoluta, para contratar con el Estado,  la circunstancia de haber aportado a las campañas de los partidos o candidatos, a cargos de elección popular.

9ª- Que por decreto de vigencia nacional se prohíba otorgar pauta  publicitaria a los medios de comunicación y que cuando el gobierno requiera divulgar sus ejecutorias, se acuda a la información noticiosa.

10ª Que todo el Gobierno, el Congreso, las Cortes, la Fiscalía, y la Procuraduría, las Facultades de Derecho y la Sociedad Civil, los Partidos Políticos constituyan un frente común, para dotar a Colombia de un sistema judicial respetable, para que la justicia vuelva a gozar de la majestad que nunca ha debido perder. 

Con sentimiento de admiración y solidaridad,

Atentamente, 

Peloecaña