LOS NOMBRAMIENTOS DEL
PRESIDENTE Y LA CHUZADA DE LA CORTE AL DR. ÁLVARO URIBE VÉLEZ.
Por Peloecaña
Está demostrado que la señora Fiscal del proceso,
contra el coronel Plazas Vega, Dra. Ángela María Buitrago, utilizó un
testimonio de un suboficial del ejército, de apellido Villamizar, que estaba
físicamente en una unidad militar en los Llanos Orientales, y que su presunto
testimonio fue desmentido, sin el más leve asomo de duda y cuestionado por
haber sido manipulado e incluso falsificada su firma.
No obstante, esa circunstancia no fue
tenida en cuenta y, por el contrario, con esa prueba dudosa, el juez de primera
instancia condenó a una pena onerosísima al militar que comandó la recuperación
del Palacio de Justicia, Coronel Alfonso Plazas Vega, tomado por el M19 y
contratado por el narcotraficante cartel de Medellín, para destruir las pruebas
que pudieran terminar en una aprobación de la extradición de Pablo Escobar a
los EE.UU.
Esa sentencia, de primera instancia, fue
revocada por el Tribunal competente y el Coronel Plazas Vega, a partir de su
notificación y declaratoria de firmeza y ejecución hasta hoy, goza de su
libertad plena.
Pero también es un hecho notorio que el
Coronel Plazas Vega padeció injustamente la privación de su libertad por más de
ocho (8) años, en condiciones infrahumanas, y ni
siquiera le permitieron asistir a los funerales de su
señor padre.
Su dignísima y amantísima esposa fue su
soporte espiritual y la columna vertebral de la resistencia que le permitió al
militar injustamente procesado y condenado a priori, sobrellevar
su humillante condición de reo de nada y a su familia, el
peso de tan estrambótica injusticia, la actuación de una
justicia ausente y retaliatoria, de pronto para satisfacer instintos
primarios y bajas pasiones, todo con la toga, la balanza y la espada de Temis.
No es aventurado ni mentiroso, afirmar que
en el caso Plazas Vega fue secuestrado el artículo 29º Constitucional.
Fue tan evidente la injusticia que el Dr. Álvaro
Uribe Vélez, para resarcir tamaño entuerto, que él jamás había ocasionado, colocó
a doña Tania Vega de Plazas en la misma lista para el senado, que él
encabezó y de la que también formó parte el hoy presidente de los
colombianos, Dr. Iván Duque Márquez.
Los tres fueron elegidos senadores,
conformaron la misma bancada
parlamentaria y ocuparon dentro del recinto senatorial curules limítrofes.
Elegido el Dr. Duque, por todos nosotros
sus electores, Primer Magistrado de la República, su primer acto de
gobierno fue designar su gabinete ministerial, de acuerdo con el mandato que le
otorga el numeral 1º del artículo 189º de la Constitución y así lo hizo.
Después vinieron los cuestionamientos y
ayayayes, por el ejercicio super legitimo de esa facultad.
Un caso concreto ha sido la designación de
la Ministra de Justicia, por su amistad manifiesta con la exfiscal Ángela María
Buitrago, que todos consideramos insolidaria por parte de nominador, con
Doña Tania Vega de Plazas.
Desde luego, estamos prejuzgando, porque
Doña Tania no se ha manifestado al respecto, ni la Ministra ha desmentido o
confirmado la presunta estrecha amistad, con la verdugo implacable del
gallardo militar.
Otra actitud repetitiva: El anuncio de la
designación como Superintendente de Industria y Comercio, en cabeza de un
profesional de apellido Barreto, al parecer cuota del senador José Obdulio
Gaviria, pero no del partido Centro Democrático que, sin duda, fue el
mayor aportante electoral al triunfo del Dr. Duque.
El Superintendente, en proyecto, se ha
caracterizado por sus trinos, en contra de uribistas connotados como Andrés
Felipe Arias Leiva, trinos denigrantes y, desde luego, inaceptables.
De tales mensajes en las redes sociales,
tampoco se ha escapado el propio Dr. Uribe Vélez, padre político del
Presidente nominador, y no contento con sus desafueros Barreto se ha
dedicado a exaltar la figura del Senador que, además de ser enemigo declarado del
expresidente Uribe, es evidente enemigo del agua, por su
fobia a la ducha, y además se peda.
Cuando el Presidente Duque anunció el
nombramiento de una mujer llena de méritos, como jefe de la Unidad encargada de
la seguridad individual de muchos personajes, los guerrilleros de las FARC
vetaron su designación e inmediatamente el gobierno reculó.
Creo igual en la equivocación de la Corte
para chuzar el teléfono del Dr. Uribe, como en la designación, por error, de
Barreto.
José Obdulio Gaviria dice que Barreto "se arrepintió". Paloma Valencia dice que el señor es una "maravilla envuelta en huevo" y que dizque nos está ayudando de tal manera que casi nos debemos inclinar ante él a agradecerle. ¿Quién seguirá en la cola? Lo que es a mí me todo esto me produce asco. Este pais no tiene salvación.
ResponderEliminarGracias por su magnífica columna.
Completamente de acuerdo con el Maestro Peloecaña.EXCELENTES SUS EDITORIALES!
ResponderEliminarComo independiente expreso lo anterior, con unas palabras, bastantes acertadas y proféticas, tomadas de la Biblia: -Que en los últimos tiempos, llamarán mal al bien y al bien mal- y, esto es lo que esta pasando en Cocalombia, un país repleto de hampones, corruptos e hipócritas. Bastante regular comenzó Iván Duque su gobierno y es mucho decirle así. Pues comparándolo con el inmediato anterior -que fue un desastre- Se le debe calificar en una escala de 0 a 5, con una nota de 2.5 y es mucho.
ResponderEliminarOjo. Centro Democrático. No defrauden al país o se nos entra el tenebroso Socialismo Siglo 21 que esta acabando con Venezuela, Nicaragua, Cuba, etc. Nada que hacer ya. Rectifiquen de nuevo todo. Están a tiempo. Necesitamos más mano dura.
Bien profesor por estos artículos. Nada de contemplaciones con los Fariseos. Ellos saben quienes son por estos días de caos e incertidumbre.
Ahora no nos falta también que desde la otra orilla el castro chavismo, con la ayuda de China comunista con apariencia de capitalismo salvaje, le tire una ojiva nuclear y acabe de convertirlo todo en una cochambre.
Mejor dicho, que ¡Desorden total! pata no ser aves de mal agüero. ¿Y la Hora de la verdad... Cuando va a entrevistar al señor presidente Iván Duque, para sacarle todos los trapitos al Sol?
¡Que descalabro! ¿Más?