FELIZ AÑO COLOMBIA
Por Poloecaña
Para mis amables lectores un deseo
vehemente porque el año 2020, les traiga mucha salud, mucha paz y muchas
satisfacciones personales a todos.
Quiero dirigirme a los parlamentarios del
Centro Democrático para proponerles una adición al artículo 249º de la
Constitución, que vendría a ser el párrafo 3º de dicha norma:
Señor doctor
Álvaro Uribe Vélez
Senador de la República
Respetado Senador, saludo respetuoso y
cordial junto con mis votos fervientes, para que el año 2020 sea para usted
y su familia, ubérrimo en prosperidad, paz y salud; el mismo deseo para todos los
parlamentarios del Centro Democrático y sus familias.
Con el derecho que me concede el haber sido
su elector consuetudinario, desde que ese Partido existe, dejando en claro que
siempre lo he hecho en mi condición de militante activo del Partido
Conservador, con toda consideración y reconocimiento, me permito formularle a usted
y a su bancada parlamentaria tener en cuenta la siguiente petición, para que
sea analizada y, si la encuentran ceñida a derecho, la plasmen en un proyecto
de Acto Legislativo, que adicione la Constitución, en su artículo 249º,
así:
"La Corte Suprema de Justicia no podrá
abstenerse de considerar cualquiera de los nombres de los ternados por el
Presidente de la República, salvo cuando no llenen los requisitos que este
artículo exige para ser elegido Fiscal General de la Nación. Si pasados quince
(15) días calendario después de recibida la terna por la Corte Suprema de
Justicia, ésta no hubiere elegido al Fiscal, lo designará el Presidente, por decreto".
Colombia está hastiada de la actitud
reiterada y omisiva y, desde luego, inconstitucional de los magistrados
encargados de elegir la máxima autoridad investigadora del sistema judicial y
cansada de ver como los que conforman la cúspide de la Rama Jurisdiccional del
Poder público hacen de la Carta Fundamental, rey de burlas y sayal personal,
dentro de la más pasmosa impunidad.
No dudo de que mi propuesta es un aporte
importante a la institucionalidad del Estado Colombiano.
Claro que si, un feliz año, para todos. Pero como empezó, con un infeliz año el señor Iván Duque Marquez. Que mediocridad la que se manda. Que talante. Nombrando a una ministra verde con carisma de aguacate de la Universidad de Guadalajara, donde fueron condecorados Alias Juhampa Santos y su camarada Alias Timochenko. No sale de trastadas este gobierno. Y apenas comienza el 2020. Que vergüenza.
ResponderEliminarOración por la Paz en Colombia (Para recitar todos los días)
ResponderEliminarEn el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Padre, Tú eres un océano de paz y nos regalas por medio de tu Hijo Jesucristo y por la acción del Espíritu Santo este don, y lo siembras en nuestro corazón por medio de la conversión y la reconciliación.
Tú nos confías la paz a nuestra responsabilidad, convirtiéndonos en artesanos de la paz, para construirla con “pasión, paciencia, experiencia y tesón”.
Tú quieres que nuestras familias sean escuelas de paz donde te escuchemos, acojamos y te sigamos mejor y, así germinen palabras y gestos de perdón, escucha, diálogo, ternura, amor y reconciliación. Que los niños y jóvenes se conviertan en protagonistas de un futuro de paz.
Acompáñanos en las responsabilidades que tenemos en nuestra vida social, política, económica, cultural y eclesial. Haz que difundamos el respeto por la vida, las personas y la creación; que seamos solidarios, fraternos, justos y trabajadores del bien común.
Acoge en tu casa a quienes murieron víctimas de la guerra fratricida, mueve el corazón de los actores violentos para que vuelvan a Ti y sean también ellos constructores comprometidos de la paz. Fortalece a las víctimas en su dignidad y otórgales valentía para ofrecer el perdón.
Que María Reina de la paz, nos ayude a desarmar el corazón, a vivir la justicia, el perdón, la reconciliación y la paz, para que nazca en Colombia la civilización del amor y no de la corrupción y el rencor que desembocan en caos, anarquía, destrucción, guerra y tristeza.
Que con tu preciosísima sangre, Divino Maestro y redentor del Universo, nos convirtamos y perdonemos a todos los que nos han hecho mal de diferentes modos. Que sin esto, nos podemos condenar en el infierno eterno. Que no basta buenas intenciones, sino, acciones amorosas en el Nombre tuyo.
Que María Santísima guie nuestros pasos al Paraíso Celestial, al que todos estamos llamados. Y, que San José nos ayude en cada jornada diaria, para que no nos falten ni los alimentos y ni las medicinas.
Que San Miguel arcángel, nos proteja contra todo vicio, mal, odio y desunión que siempre desembocan en la destrucción del alma y del cuerpo.
Que podamos imitar a los santos del cielo y que ellos sean un modelo para construir una patria y un mundo lleno de Paz, Justicia y nuevas relaciones. Repletas de comprensión, armonía y amor.
En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.