domingo, 16 de julio de 2017






LA  CARTA DE LOS PERIODISTAS CONTRA EL DR. ÁLVARO URIBE VÉLEZ



Por  Peloecaña

Estas son las frases que Daniel Samper Ospina escribió contra la indefensa infante Amapola Rodríguez Valencia y su señora madre, la senadora Paloma Valencia Laserna:

"A Jorge y a mi nos pareció raro que la doctora le pusiera Amapola a la hija, con todo lo que ha sucedido con el cartel terrorista de la FAR. Pero bueno, de grande será heroína como su madre."

"... yo traté de acercarme para la foto con la doctora Paloma, pero ya se iba para la casa a ver a la niña. Dios mediante la cuide y busque el varoncito. Le podría poner Opio."

Si esas dos frases no son violencia neta y químicamente pura contra Amapola y su progenitora, los periodistas solidarios con el agresor de una recién nacida absolutamente indefensa, pero jamás indefendida, y contra su progenitora, mujer honestísima y valerosa, denostada por discrepar políticamente de su infame agresor, dirán que no existe la violencia en el mundo.

Heroína no es solamente una mujer de valor heróico, también es una sustancia sicotrópica, nefasta, nefanda, fatal y destructora de la juventud y la familia en el mundo. El opio también, y eso bien lo sabe el abusivo agresor de Amapola y Paloma; por eso no puede pretender que su intención, al escribir la afrentosa calumnia e injuria, era la de hacer un chiste flojo o hacer un chascarrillo inocuo, lejos de cualquiera mala intención.

Lo escrito por Samper Ospina encuadra plenamente en una conducta penal típica punible cometida a mansalva y sobreseguro, y con toda la mala intención y la mala leche del mundo, absoluta e inevitablemente dolosa.

¡Qué pena que todos esos atropellos se cometan en nombre de la libertad!,  cuando, por el contrario, constituyen una  afrenta a tan valioso don.

¿En qué queda el respeto a la opinión ajena, el respeto al derecho que les asiste a los padres a bautizar a sus hijos, según su leal saber y  entender? ¿quién puede censurar válidamente a Daniel Samper Pizano y a su digna esposa por bautizar a su hijo, Daniel, igual que el dictador de Nicaragua?

¿Acaso la libertad, así sea la de prensa, no está basada en el libre examen, el libre albedrío, la tolerancia, el respeto al pensamiento ajeno?

Daniel Samper Ospina y muchos de sus colegas son campeones y records mundiales del juicio irrespetuoso de la dignidad de las personas y de la profanación del disenso.

Señores comunicadores, no hay efecto sin causa y el aforismo de los juristas romanos "vim vi repellere permititur" es la piedra angular de la legítima defensa.

Si Samper Ospina no agrede grave y alevemente a Paloma Valencia Laserna y a su hija Amapola, no hubiera habido trino del Expresidente Uribe.

No olviden que en la legislación colombiana es válida la legítima defensa de un tercero.

Pero como el escribidor de marras es reo reiterativo e inveterado de agredir a los demás, también es reo de ataque injustificado reciente al pueblo antioqueño, patria del Dr. Álvaro Uribe Vélez, y la Patria, para las personas normales, es tan respetable como la propia madre y respetable, desde luego,  como el ejercicio de todas la libertades.

Las personas que suscriben el mensaje al Expresidente Uribe bien podrían enmendar la plana, recogiéndolo y enviándolo a su colega Samper Ospina,  destinatario al que mejor le cae su texto y contenido. 

El cumplimiento de ese cometido es bien fácil de lograr. Basta con remplazar lo escrito y cambiar  donde dice "Expresidente Álvaro Uribe Vélez", por periodista Daniel Samper Ospina, y entonces quedaría más ajustado a la verdad: "Es hora de que el periodista Daniel Samper Ospina deje atrás la práctica sistemática de difamar, calumniar e injuriar" a quienes opinan diferente a él, "como si no  fuera un (periodista) obligado a dar ejemplo, ni un ciudadano sujeto al código penal".

"Y es tiempo de que el (periodista) esté a la altura del enorme poder del que ha venido abusando sin mayores consecuencias: El último ejemplo de su estrategia de estigmatizar e intimidar para imponerse en el debate público, aquello de permitirse..."( escribir: "A Jorge y a mi nos pareció raro que la doctora le pusiera Amapola a la hija, con todo lo que ha sucedido con el cartel terrorista de la FAR. Pero bueno, de grande será heroína como su mamá)".

("...yo traté de acercarme para la foto con la doctora Paloma, pero ya iba para la casa a ver la niña, . Dios mediante a cuidarla y busque el varoncito para quedar con la pareja. Le podría poner Opio.")

Si esto no es injuria dolosa y afrentosa, el congreso deberá legislar para declarar a todos los que se dicen periodistas,  inimputables.

Si quien trinó que Daniel Samper Ospìna es un violador de niños fuera el del puesto de revistas que vende Semana, la solidaridad gremial no hubiera aparecido por parte alguna, pero como el trino se lo atribuyen al Expresidente Uribe, como en Fuente Ovejuna han acudido todos a una, como cuando sonaba la campana de Pávlov, a reclamar su ración de expresidentes. ¡Que jauría de oportunistas  famélicos!

La carta de los comunicadores que la suscriben, antes que una manifestación de solidaridad, con el injuriador consuetudinario y en defensa de la libertad, es una apología del delito, por los tantos de injuria que comete el columnista de Semana.


4 comentarios:

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  2. Bien merecido lo tiene esa lacra maldita comunista de Daniel samper que al igual que su tío gonorrea de Ernesto samper son narcoterroristas hiueputas

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  3. Excelente su análisis, estimado Peloecaña

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  4. Una gran respuesta a todos esos periodistas que firmaron esa carta, inclusive de unos 2 que se consideran uribistas. Lo menos que han podido hacer es guardar silencio, porque lo escrito por ese supuesto periodista no deja de ser infame.

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