EL CAPELLÁN DE LAS FARC
Por Peloecaña
El gran columnista y analista de la
realidad política colombiana, Eduardo Mackenzie, en un magistral
artículo, escrito para Debate, se refiere, a la prédica que en la Semana Mayor
pronunciara en la Catedral Primada de Bogotá, el sacerdote comunista y cardenal
ídem, decano de la jerarquía católica de mi Colombia, y que titula el
comentarista "Baculazos
insólitos."
A pesar de la prestancia del autor del
comentario y de la verdad del contenido de su columna, me voy a apartar,
respetuoso, del texto y el espíritu de su escrito, no sin antes presentar
disculpas por mi interpretación contraria a lo consignado en la misiva.
Dice y sustenta, con argumentos
irrebatibles, que la prédica del purpurado se basó en pretender que su grey no
debe tenerle miedo a las FARC ni a los alzados en armas; que a los que hay que
temerles es a los sembradores de cizaña, (léase contradictores del régimen).
Perdone usted, Don Eduardo, pero disiento
de su sesuda y ponderada opinión; el capellán de las FARC tiene razón, no hay
ya motivos de temor ante las FARC; el que nos inspira pánico y pavor es el
Capellán de las FARC, un tal monseñor Rubén Salazar.
1º.- Miedo, por su desfachatez de fungir
como jerarca de la religión mas profesada por los colombianos y asumir la
apología de quienes sostienen que la religión es el opio del pueblo.
2º.- Miedo, por su incoherencia
pasmosa de aparecer como pastor de los discípulos de Cristo, que es Dios
humanado, y asumir la defensa del marxismo ateo.
3º.- Miedo, por utilizar, con el más
aberrante de los cinismos, la cátedra sagrada, el púlpito, de un templo
católico, la Catedral Primada de Bogotá, para enviar mensajes mentirosos,
a los que él cree sus ovejas.
4º.- Miedo, por asumir, de oficio, la
capellanía del movimiento guerrillero de la insurgencia, en contra del querer
de todos los católicos.
5º.- Miedo, por atreverse a catalogarnos a
todos los militantes de la fe católica, como una recua de acémilas.
6º.- Pánico, por su deslealtad con las
personas y la memoria de Monseñor Jesús Emilio Jaramillo, Monseñor Isaías
Duarte Cancino, los dos obispos católicos, asesinados por la guerrilla que el
capellán defiende a ultranza.
7º.- Pánico, por ser solidario con los
secuestradores de Monseñor Jaime Jaramillo y por ser, también, solidario con
tantos asesinatos de sacerdotes, monjas y fieles católicos y cristianos.
8º- Pánico, por su solidaridad con la
guerrilla narcotraficante que está destruyendo la juventud del mundo, el
medio ambiente sano y la infraestructura de Colombia.
9º.- Pánico, por su silencio cobarde,
criminal y anticristiano ante la violación de niñas y niños y la
mutilación de colombianos humildes, defensores de la patria y de campesinos
también humildes.
10º.- Pánico y pavor, por su solidaridad
con este gobierno, y estos jueces corruptos hasta el cansancio y venales
hasta la saciedad, y estos legisladores que, igual que el monseñor de marras,
han sido coautores de la permisividad del aborto, la ideología de género y el
estado de postración en que se debate la sociedad colombiana.
Totalmente de acuerdo amigo Peloecaña , con una salvedad , Las farc , la farc y sobretodo sus amigos y secuaces siguen siendo altamente peligrosos para la salud de la Democracia
ResponderEliminar¿CARDENAL SALAZAR, SALVADIDAS DEL CASTROCHAVISMO EN COLOMBIA?
ResponderEliminar¿Cómo entender que nuestro Cardenal, el más importante Pastor del rebaño colombiano, profane un Viernes Santo al pronunciarse en defensa indirecta de los lobos del castrochavismo que hoy amenazan a nuestra amada Colombia? ¿Por qué menosprecia ese gravísimo riesgo al fustigarlos como “miedos manipulados”? ¿Será que padece de una conveniente amnesia?¿Cómo pasa por alto la muy antigua e íntima relación personal, pero sobretodo ideológica, de Petro con Fidel Castro, con Chavez y con Maduro? ¿Cómo pasa por alto el helado ateísmo de Fajardo, su marxismo cultural, esto es su jihad en favor de la ideología de género (aborto, adopción de niños por parejas gay, matrigay, eutanasia, educación sexual abierta y obligatoria desde prescolar, etc)?
¿Cómo es que, en cambio, nuestro atinado y muy caritativo Cardenal Salazar no ha tronado contra un monstruoso y continuado crimen de lesa humanidad como lo es la no entrega por parte de Farc de mas de 3000 niños ‘reclutados’ a la fuerza para servicios varios y sexuales? ¿Cómo también lo es la no entrega de mas de 500 secuestrados, nunca devueltos por Farc , que terminaron sepultados en un inhumano olvido oficial y mediático?
Que doloroso y triste es constatar, en la cúpula de nuestra Iglesia católica colombiana, el cumplimiento de las graves advertencias del Papa Pablo VI dadas el 7/12/1968: “la Santa Iglesia Católica sufre un misterioso proceso de autodemolición.” En otra ocasión, 29/06/1972, el mismo Papa afirmó: “El humo de Satanás penetró en el recinto sagrado.”
Monseñor, como católico practicante, y de rodillas, le pido: rectifíquese, sea prudente!! Por favor trate de comportarse como el Pastor de turno de nuestro rebaño!!